La Musica y la Salud.
El uso de la música como método de sanación, proviene de los tiempos bíblicos. Se dice que David le tocaba el arpa al Rey Saúl para aliviarle de “malestares espirituales” 400 años antes de Cristo.
Hipócrates, el padre de la medicina, le tocaba música a sus pacientes mentales.
El sicólogo persa, al-Farabi (872–950), escribió sobre el tratamiento medico, utilizando la música en su manual,
Sentido del Intelecto.
Aristóteles describe la música como una terapia que purifica las emociones.
En el siglo 13, hospitales Árabes tenían salones de música para el beneficio de los pacientes.
En el libro del siglo 17, La Anatomía de la Melancolía, su autor Roberto Burton, escribe sobre lo esencial que son la música y el baile en el tratado de enfermedades mentales, especialmente la melancolía.
En los EEUU los curanderos de las tribus de indios nativos tradicionalmente han utilizado y siguen utilizando cantos, música y bailes como método de sanación.
En tiempos modernos, la terapia con música comenzó luego de la primera y segunda Guerra mundial cuando músicos iban a hospitales y le tocaban a los soldados heridos y que sufrían de traumas físicos y emocionales.
En la adolescencia, la música frecuentemente es utilizada como instrumento que une socialmente a diversos grupos, y ayuda en establecer un enlazo común entre diversas culturas.
La música, frecuentemente sirve como una vía creativa para poder controlar emociones y encontrar la manera de hacer frente a situaciones difíciles.
Se reconoce que la música afecta a porciones del cerebro. Se ha visto que programas de musica escolares ayudan a fomentar la confianza y la autoestima.
Se ha demostrado que la terapia musical se asocia con una disminución de la depresión, un mejoramiento del estado de ánimo y que produjce una reducción en los estados de ansiedad.
Estudios descriptivos y experimentales han documentado los efectos beneficiosos que tiene la música en la calidad de vida, la interaccion con el medio ambiente, la expresión de los sentimientos, la conciencia y las asociaciones positivas.
El uso de la musicoterapia (MT) en el tratamiento de trastornos mentales y neurológicos va en aumento. La musica terapia ha demostrado ser eficaz en el tratamiento de muchas condiciones, incluyendo la esquizofrenia, la amnesia, demencia, el Alzheimer, la enfermedad de Parkinson, trastornos del ánimo como la depresión, trastornos similares del habla, y el síndrome de Tourette, entre otros.
El Alzheimer, la demencia, al igual que el insomnio son tres de las enfermedades más comúnmente tratadas con MT. Se ha encontrado que la musicoterapia ofrece resultados significativos en pacientes con trastornos depresivos severos
Un estudio reveló que el escuchar música sedante por sólo 30 minutos al día durante dos semanas, resulto en una mejor puntacion en pacientes con varias escalas de depresión.
Se observó que estos efectos son acumulativos, durante el período de tiempo del estudio, es decir, un tratamiento más prolongado condujo a una mejoría mayor. Se ha demostrado que la música puede disminuir significativamente los niveles de la hormona del estrés, el-cortisol, lo que mejora el afecto, el estado de ánimo, el humor y el funcionamiento cognitivo.
Se ha encontrado (medido por electro-encefalograma) que la música produce un cambio en la actividad del lóbulo frontal en adolescentes deprimidos.
La música cambia y traspasa la actividad del lóbulo frontal derecho al izquierdo, un fenómeno que se asocia con un efecto positivo del ánimo.
Investigaciónes han demostrado que música con un ritmo fuerte estimulan las ondas cerebrales, las que comienzan a resonar en sincronía con el ritmo, trayendo una concentración más aguda y un pensamiento más alerto.
Este cambio en la actividad de las ondas cerebrales puede activar el cerebro para aportar beneficios duraderos al estado de ánimo, incluso después que se deja de escuchar.
Con alteraciones en las ondas cerebrales vienen los cambios en otras funciones corporales.
La respiración y el ritmo cardíaco pueden ser alterados por la música. Esta es la razón por la que la música puede ayudar a contrarrestar o prevenir los efectos dañinos del estrés crónico. La musica disminuye la presión arterial, aumentan la inmunidad, y relaja la tensión muscular.
Los investigadores han encontrado que la terapia con la música, cuando se usa con medicamentos contra las náuseas en pacientes que reciben quimioterapia de dosis alta, puede ayudar a aliviar las náuseas y los vómitos. La musicoterapia ayuda aliviar el dolor a corto plazo incluyendo el dolor causado por cáncer.
En los pacientes bajo cuidados paliativos, un estudio encontró que la musicoterapia mejora el confort, la relajación y el control del dolor. Otro estudio encontró que la calidad de vida mejoró en los pacientes con cáncer que recibieron terapia de la música.
La musica conlleva a una reducción en la frecuencia cardíaca, presión arterial, frecuencia respiratoria, el insomnio, la depresión y la ansiedad. Estudios científicos han demostrado la importancia de la musicoterapia en el cuerpo, la mente y el espíritu, de los niños y adultos.
También han demostrado que estudiantes que toman clases de música mejoran los niveles del cociente intelectual, y muestran una mejoría considerable a en habilidades no musicales.
Los estudios de la circulación cerebral han demostrado que los que escuchan a Mozart tiene más actividad en ciertas áreas del cerebro. Esto ha sido llamado el "efecto Mozart". Aunque las razones de este efecto no son completamente claro, este tipo de información apoya la idea de que la música puede ser usada de muchas formas útiles.
Con tantos beneficios y efectos físicos profundos, no es estrano que muchos ven la música como una terapia importante para mantenernos saludable.
Conclusion, los estudios han demostrado que la música puede afectar a las ondas cerebrales, la circulación del cerebro y las hormonas del estrés. La música puede ser usada para atraer un estado de ánimo más positivo, ayudando a controlar la depresión y la ansiedad, ayudando a mantener la creatividad y los niveles de optimismo más altos. Estos efectos se observan durante y después de la terapia musical.